La Constitución de la República Dominicana, establece en su artículo Núm. 10 que es de supremo y permanente interés nacional la seguridad, el desarrollo económico, social y turístico de la Zona Fronteriza, su integración vial, comunicacional y productiva, así como la difusión de los valores patrios y culturales del pueblo dominicano. Además indica, que el aprovechamiento agrícola e industrial de los ríos fronterizos se regulará por los principios consagrados en el artículo Núm. 6to., del protocolo de revisión de 1936, del Tratado de Frontera de 1929, y del artículo Núm. 10 del Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje del 1929.
Tomando en consideración, lo anteriormente señalado, el 16 de agosto del año 2000, el Poder Ejecutivo emitió el Decreto Núm. 443-00, mediante el cual se crea la Dirección General de Desarrollo Fronterizo, con el objetivo de impulsar el desarrollo económico y social en la región fronteriza del país.
De acuerdo a lo señalado en el decreto de creación, el ámbito geográfico de la DGDF está conformado por siete (7) provincias, estas son: Dajabón, Montecristi y Santiago Rodríguez, en el Noroeste central y costero; Elías Piña, Independencia y Bahoruco, en las partes centrales de la frontera; y Pedernales en el Suroeste costero. Todas estas provincias están caracterizadas por altos niveles de pobreza y pobreza extrema, servicios públicos limitados y una significativa migración de habitantes del país fronterizo con República Dominicana.
Los tratados binacionales vigentes del año 1929, dieron origen al trazo de la demarcación fronteriza dominico-haitiana, en la cual se fijaron 311 pirámides a lo largo de 388 kilómetros de línea fronteriza, que definen la división territorial entre la República Dominicana y la República de Haití.
A nivel geopolítico, la frontera dominico–haitiana, está constituida por cinco provincias, al norte Dajabón y Montecristi y al sur: Elías Piña, Independencia y Pedernales. Sin embargo, por sus índices de pobreza se incluyeron las provincias de Bahoruco y Santiago Rodríguez, considerándolas fronterizas para las acciones de nuestra institución.
La Dirección General de Desarrollo Fronterizo despliega su gestión en la frontera mediante programas y proyectos sociales y económicos de emprendimiento, en las comunidades más vulnerables, destinados a aprovechar las relaciones establecidas entre Haití-República Dominicana.
Igualmente la Dirección se ha propuesto implantar sistemas que promuevan la conservación del medio ambiente, con el fin de desarrollar el ecoturismo fronterizo, dicha acción se realiza en coordinación con otras entidades que desarrollan programas similares en la región fronteriza, así como fortalecer la capacidad productiva de la zona, para contribuir en el logro de la autosostenibilidad de las comunidades, creando vínculos entre las ciudades medias y las áreas rurales, que garanticen el desarrollo integral de la frontera.